Tejido óseo donde demuestran la relación entre una proteína y el cáncer. UNIV. DE OVIEDO
MARÍA VALERIO
Madrid
21/12/2015 17:56 Normalmente, en el origen de un tumor siempre hay una mutación, una alteración genética que permite a las células perder su orden habitual y multiplicarse sin control. Pero no es habitual que una sola proteína inactiva esté detrás del origen de un cáncer , como ahora acaba de descubrir un equipo de investigadores españoles liderados por Carlos López-Otín. La proteína se llama AIRAPL y en trabajos anteriores con el gusano C. elegans ya se había observado que cuando se inhibe su acción el animal muere prematuramente. Por eso, el equipo del catedrático de la Universidad de Oviedo se interesó por el papel que podía tener esta pieza en otra especie animal más desarrollada como los ratones. "Desarrollamos un modelo de ratón en el que inactivamos desde el nacimiento esta proteína e inmediatamente los animales desarrollaron un tipo de tumor hematopoyético", explica a EL MUNDO Fernando García Osorio, investigador del departamento de Bioquímica y Biología Molecular y principal autor del estudio que este lunes publica la revista Nature Medicine. ....