De un tiempo a esta parte parece como si a las mujeres cuando les diagnostican un cáncer de mama no tuviera una gravedad extrema. Especialistas, investigadores y la sociedad misma nos trasladan a veces la creencia de que de un cáncer de mama no se muere. Díganselo a Bimba Bose o a mi mujer, Inma Berenguer.
Hay un tipo llamado “triple negativo” que nadie sabe cómo atajar. Las carreras solidarias sirven de poco. Siempre nos recuerdan los casos de éxito fáciles, pero, por favor, vuelquen sus investigaciones en el incurable y metastásico.
Si alguien quiere saber algo más de Inma Berenguer durante su enfermedad, consulten el blog que escribió a lo largo de cuatro años: Inmaberenguery.— José Jaime Vidal Gómez. Denia (Alicante).