13 mayo 2015

Luchar contra el cáncer arañando el final de los cromosomas . I+D en Ratones .

ÁNGELES LÓPEZ // Madrid 13/05/2015 .

Se podría decir que las células del cáncer son hiperactivas y rayan la perfección, porque están en constante crecimiento y su número, si no se frena externamente, no deja de crecer y alcanzar así a múltiples tejidos. Un estudio realizado por investigadores del CNIO demuestra en ratones la eficacia de una nueva estrategia para luchar contra esta enfermedad, yendo al núcleo de estas células.

A medida que crecemos los tejidos se van renovando. Para ello las células se tienen que dividir -con ello se multiplican- y duplicar su material genético que está empaquetado en los cromosomas. Con cada división, el final de cada cromosoma (los telómeros) se va acortando un poco. Las células con telómeros demasiado cortos dejan de multiplicarse y acaban siendo eliminadas. En el cáncer, no ocurre lo mismo. Las células cancerígenas se dividen mucho más y, sin embargo, sus telómeros no se acortan sustancialmente porque mantienen activa la enzima telomerasa que es la que se encarga de reparar el final de cada cromosoma, proceso que permite a las células del cáncer dividirse sin fin.

La telomerasa sería para los cromosomas como la persona reponedora de un supermercado. Sin ella, los productos -los telómeros- se irían agotando y la actividad celular también. Por este motivo, algunos investigadores habían pensado que la clave para luchar contra el cáncer pasaría por eliminar o bloquear la telomerasa, es decir, quitar al reponedor del almacen. Sin embargo, desde que se quita el reponedor hasta que se agota la actividad, es decir, el cáncer, pasa mucho tiemop, algo inaceptable cuando se trata de pacientes.

La estrategia utilizada por el grupo de Telómeros y Telomerasa del CNIO, liderado por la investigadora María Blasco -y también directora del centro-, es otra distinta y actúa de forma instantánea sobre la actividad tumoral .

...