EL MUNDO | EFE /// 06/04/2016 .
El bótox paraliza a la Viagra, en sentido figurado, claro.
Se anunció como la jugada perfecta para Pfizer (fabricante, entre otras cosas, de la famosa píldora azul) y para Allergan (cuyos ingresos proceden mayoritariamente de la creación del bótox); se dijo que la fusión daría lugar a la mayor farmacéutica del mundo y que Pfizer -con sede en Nueva York- quería adquirir Allergan -con sede en Dublín- para pagar menos ingresos.
Todo eso era verdad, hasta hoy. La compañía 'madre' de las pastillas contra la disfunción eréctil ha renunciado a su plan para comprar a su competidora Allergan por 160.000 millones de dólares (más de 140.000 millones de euros), después de las trabas que habría puesto el Gobierno estadounidense para que se trasladase a Irlanda la sede fiscal de la nueva compañía.
Pfizer ha anunciado esta mañana su decisión de rescindir el acuerdo después de que el consejo votara a favor de frenar el proceso de fusión y la compañía farmacéutica con sede en Nueva York se lo notificara a Allergan.
Pfizer deberá pagar a Allergan un máximo de 400 millones de dólares, como se estipulaba en su acuerdo de fusión, en caso de que los cambios en la normativa tributaria hicieran inviable la transacción.La decisión de romper el acuerdo es el último revés en los continuos esfuerzos de Pfizer por superar lo que su consejero delegado, Ian Read, considera una desventaja competitiva respecto a rivales que pagan menos impuestos.
...