Actualmente, la única terapia sistémica aprobada para el leiomiosarcoma avanzado es la monoterapia basada en doxorrubicina. A pesar de la decepcionante supervivencia libre de progresión (PFS) y la supervivencia general (OS), ninguna terapia combinada ha demostrado formalmente ser más efectiva. En este entorno clínico, la selección de la terapia más eficiente es clave, ya que la mayoría de los pacientes se vuelven rápidamente sintomáticos con un estado funcional deficiente.
Esta revisión tiene como objetivo describir la función emergente actual de la doxorrubicina y la trabectedina en el ámbito de primera línea , en comparación con la doxorrubicina sola, el tratamiento estándar actual.
Hallazgos recientes
Los ensayos aleatorizados anteriores centrados en terapias combinadas (doxorrubicina + ifosfamida, doxorrubicina + evofosfamida, doxorrubicina + olaratumab o gemcitabina + docetaxel) nunca informaron resultados positivos en el criterio principal de valoración (SG o SLP). Por primera vez, el LMS-04 aleatorizado de fase III demostró que la doxorrubicina y la trabectedina tienen una mejor SSP y una mejor tasa de control de la enfermedad (DCR) en comparación con la doxorrubicina, con toxicidades más altas pero aún manejables.
Resumen
En el entorno de primera línea , los resultados de este ensayo fueron fundamentales por numerosas razones; Doxorrubicina-Trabectedina es la primera combinación que ha demostrado ser más efectiva en términos de PFS, ORR y tendencia de SG en comparación con la doxorrubicina sola; además, está claro que los ensayos relacionados con el sarcoma de tejidos blandos deben esforzarse por basarse en la histología.