25/05/2015 // Josep Corbella // La Vanguardia .
Como nuevo presidente de la Asociación Estadounidense de Investigación del Cáncer (AACR), Josep Baselga tiene la misión de definir la estrategia de la mayor organización científica del mundo en oncología. El oncólogo barcelonés, que actualmente es director médico del hospital Memorial Sloan-Kettering de Nueva York, tiene también la responsabilidad de representar a los médicos e investigadores del cáncer, y de defender los intereses de los pacientes, en los centros de poder en Washington. Coincidiendo con su visita a Barcelona el 11 de mayo para presidir la gala de la fundación de investigación oncológica Fero, Baselga detalló su visión de la lucha contra el cáncer en una conversación con ‘La Vanguardia’
Nos encontramos en un momento de progreso acelerado contra el cáncer”, afirma Josep Baselga. “Hemos avanzando mucho en los últimos años y seguiremos avanzando aún más rápido en los próximos. Tenemos un conocimiento cada vez más exhaustivo de las causas y de los factores de riesgo del cáncer. Esto debería llevar a reducir la probabilidad de que cada uno de nosotros tenga cáncer; a que aquellos que lo tengan reciban mejores tratamientos, y a que aquellos que lo han superado disfruten de una buena calidad de vida. Me siento muy optimista de cara al futuro. Veremos grandes progresos en los próximos años”.
BIOPSIAS LÍQUIDAS
“Analizaremos el cáncer en la sangre igual que el colesterol”
“Ahora ya tenemos la capacidad de detectar, con análisis de sangre, ADN procedente de células cancerosas. No sólo de los cánceres propios de la sangre, sino de prácticamente cualquier tipo de tumor. Esta tecnología, que llamamos biopsia líquida, cambiará de manera importante la detección precoz y el tratamiento de los tumores.
”Cambiará la detección precoz porque con los análisis de sangre podremos identificar el cáncer antes de que cause síntomas. Por lo tanto, podremos interceptar la enfermedad desde sus fases iniciales, en un momento en que habrá más probabilidad de curarla. Dentro de pocos años, analizaremos el cáncer en la sangre con controles periódicos igual que ahora analizamos el colesterol.
”En cuanto al tratamiento, cambiará porque podremos identificar las mutaciones genéticas de los tumores en la sangre y deducir qué tratamiento es más adecuado para cada paciente en cada momento. Veremos inmediatamente si la cantidad de ADN tumoral en la sangre se reduce. Esto nos permitirá saber en cuestión de días si un paciente responde a un nuevo tratamiento o si debemos cambiarlo.
”Las biopsias líquidas se han empezado a utilizar sobre todo con fines de investigación. Pero los avances científicos están llegando cada vez más rápido a los pacientes, y no falta mucho para que su uso se extienda a gran escala. Pienso que en tres o cuatro años esta tecnología puede estar a punto para aplicarse de manera rutinaria”.
INMUNOTERAPIA
“Es el avance más importante de los últimos años”
“Conseguir que el sistema inmunitario reconozca y ataque las células tumorales ha sido el avance más importante de los últimos años en oncología. Hay casos de pacientes para los que no teníamos ningún tratamiento y que han respondido a la inmunoterapia de manera extraordinaria. Lo hemos visto sobre todo en casos de melanoma metastático y lo estamos empezando a ver también en algunos subgrupos de pacientes con cánceres de pulmón, de riñón, de mama… Por ahora la inmunoterapia se aplica a una minoría de pacientes en un grupo reducido de tumores. Pero el potencial que tiene de cara al futuro es enorme. Estamos sólo al principio. Aún es demasiado pronto para saber hasta dónde llegaremos con la inmunoterapia. Probablemente no todos los cánceres se podrán tratar de este modo, y está claro que el tratamiento deberá combinarse con otros tipos de terapia, como la radioterapia o los fármacos de terapias moleculares. Pero controlar el cáncer con nuestro propio sistema inmunitario abre una nueva vía para controlar la enfermedad a largo plazo”.
ANÁLISIS DEL GENOMA
“Aportan una cantidad enorme de información muy útil”
“Tanto la genómica como las tecnologías de la información han experimentado avances tecnológicos extraordinarios en los últimos años. Combinándolas conseguiremos avances igual de extraordinarios en el tratamiento del cáncer. En estos momentos ya estamos secuenciando los genomas de células tumorales de miles de pacientes. Esto nos aporta una cantidad enorme de información, que es muy útil y que en el futuro lo será aún más. Por ejemplo, podemos identificar si el tumor de un paciente tiene una alteración genética concreta para la que disponemos de un fármaco, aunque este fármaco no se haya estudiado para este tipo de tumor. Cada vez caracterizaremos más los cánceres por su perfil genético, y no sólo por el órgano donde se han originado. También en relación con la genómica, tenemos un proyecto para permitir el acceso libre a toda la información sobre el ADN de los tumores que estamos generando y que pondremos a disposición de médicos e investigadores de todo el mundo. De este modo, si por ejemplo un médico de Sabadell tiene un paciente con una determinada alteración genética, podrá consultar si en otros lugares hay pacientes similares con esta misma alteración, y qué tratamientos han recibido, y con qué resultado”.
COMBINACIONES DE FÁRMACOS
“Nos anticiparemos a la evolución de los tumores”
“Un importante avance relacionado con la genómica es que podremos estudiar cómo evoluciona un cáncer en función del tratamiento. Haciendo biopsias líquidas antes y después de iniciar un tratamiento, y repitiéndolas después en las semanas y meses siguientes, podremos ver qué genes se alteran y de qué manera. Con estos datos, nos podremos anticipar a la evolución del tumor. Es decir, podremos predecir las alteraciones genéticas que aparecerán. Y, con una combinación de tratamientos adecuada, esperamos dirigir la evolución de algunos cánceres para convertirlos en enfermedades crónicas no mortales.
”Se lo estoy contando en futuro, porque es una línea de trabajo que traerá grandes avances, pero en realidad ya está empezando a dar frutos en la actualidad. Deje que le ponga un ejemplo de una investigación que hemos hecho en el hospital Memorial Sloan-Kettering junto a Vall d’Hebron. Acabamos de descubrir que los fármacos que inhiben la proteína PI3K en cáncer de mama pierden eficacia con el tiempo porque estimulan la actividad de los receptores de estrógenos. Por lo tanto, si combinamos los inhibidores de PI3K con inhibidores de receptores de estrógenos, podremos lograr que el tratamiento mantenga su eficacia a largo plazo”.
EPIGENÉTICA
“Investigamos cómo reeducar las células cancerosas”
“Aunque las mutaciones genéticas son muy importantes en el cáncer, sólo son responsables de una parte de todos los cánceres que se producen. En muchos casos, lo que falla inicialmente no es cómo son los genes, sino cómo actúan. Falla lo que llamamos la regulación epigenética, que a menudo depende de factores ambientales, y que determina el nivel de actividad de nuestros genes en cada célula.
”En realidad, los genes son prácticamente iguales en una célula del hígado y en una de la piel. Pero lo que hacen en uno y otro caso es muy distinto. Ahora sabemos que la diferenciación de las células en un tipo de tejido u otro depende de la regulación epigenética. Y la transformación de células sanas en células tumorales también depende en muchos casos de la regulación epigenética.
”Lo que es interesante es que este fenómeno se puede revertir. Podemos modificar el estado de las células. Lo hemos visto en algunos casos de leucemia, donde se ha conseguido que las células tumorales vuelvan a convertirse en células blancas casi normales. No son normales del todo porque siguen teniendo las mutaciones que adquirieron con el cáncer. Pero han dejado de actuar como células cancerosas. Este es un nuevo concepto que tenemos que explorar más a fondo: en lugar de destruir las células cancerosas, investigamos cómo reeducarlas”.
EL COSTE DE LOS MEDICAMENTOS
“Es necesario un debate sereno que no sea populista”
“Gracias a la intensa investigación que se ha hecho en los últimos años, cada vez tenemos más y mejores fármacos contra una amplia variedad de cánceres. Ahora tenemos que aprender a utilizarlos lo mejor posible y tenemos que conseguir que estos fármacos lleguen a aquellos pacientes que los necesitan.
”El elevado precio de muchos de estos nuevos fármacos puede ser un obstáculo. Es un problema que tenemos que resolver. Vamos a tener que hacer un debate sereno y riguroso, que no sea ni populista ni superficial, para encontrar una salida. No sé cuál será al final la solución. Pero sé que necesitamos a la industria para tener nuevos fármacos y que vamos a tener que llegar a acuerdos.
”En este debate, deberemos valorar parámetros como el coste de desarrollo de cada fármaco, si es muy innovador o es una versión mejorada de un producto anterior, cuál es su eficacia y toxicidad, o cuál es su coste por cada año de vida ganado. Y es un debate en el que no sólo deben participar la industria y la administración, sino en el que debe entrar la comunidad académica. Médicos e investigadores debemos expresar nuestra opinión sobre lo que consideramos más conveniente y correcto”.